Quieres mas economia

Loco me tienen con la economía, los mercados, el paro, la inflación, agencias de rating, calificaciones y su pota madre.

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Obsolescencia programada, crecimiento exponencial, estafa piramidal, agrandamiento distancia entre rentas, esquilmación de recursos, deuda impagable, contaminación a saco, extinción masiva de especies, alteración patrones climáticos, pandemia de infertilidad en el primer mundo, explosión demográfica en el tercero, vacas, cerdos, pollos locos, explosión enfermedades mentales en el primer mundo, explosión enfermedades físicas en el tercero, ausencia de valores, culto al cuerpo a las apariencias, codicia, despilfarro, lobby's contra científicos, opulencia, ostentación, manipulación de masas, pandemias de depresión, diabetes, trata de blancas, de organos, de armas, control de materias primas por el primer mundo, colocación de dictadores en el tercero, explotación infantil, secuestros para la prostitución, películas snuff, erosión, desertificación a gran escala, alteración cuencas hidrográficas, secado de ríos para regadíos, religiones manipuladoras, asesinato selectivo de líderes, pandemia de cancer, deforestación a gran escala, incendios de selvas para cultivar soja, aumento frecuencia huracanes, pérdida de cosechas, peak oil, cercanía pico estrativo de metales y minerales extratégicos, tasa de retorno energético de cultivos negativo, contaminación de acuíferos, salinificación de pozos, drástica reducción fertilidad suelos, especies invasivas, plagas, monocultivos, perdida de biodiversidad, mínimo reciclaje, mas energía gastada en reciclar que en extraer de nuevo, hacinamiento en el tercer mundo, soledad crónica en el tercero, desaparición de corales, ampliación de los desiertos marinos.

Todo está bajo control, preparémonos para un nuevo salto en la evolución, si la tierra dejó de ser el centro del universo, el hombre lo será de la tierra.

No en vano somos los seres más inteligentes de la Tierra. Los reyes de la creación.


La guerra operativa










Nos tienen locos con tanto moviles y sistemas operativos.
¿Quien quiere dominar el mundo?
¿Quien gastara más para que consumas?

¿Y para que sirve eso?
















Genial viñeta de | La Risa de la Ciencia

El día que el océano volvió a ser temible

La tecnología actual presume de haber conquistado los mares o, al menos, su superficie. Grandes catástrofes, como la casi centenaria del Titanic, sirvieron para mejorar la técnica naval hasta límites antes no imaginados. Hoy surcan los océanos monstruosas naves capaces transportar miles de contenedores, inmensos petroleros y cargueros de todo tipo, portaaviones majestuosos con propulsión nuclear… ¡el océano ha sido conquistado! Cierto es que sigue habiendo accidentes y, de vez en cuando, alguna catástrofe, pero para los grandes navíos del mundo ya no hay miedo a adentrarse en lo profundo del océano. Los antiguos monstruos marinos ya no decoran los mapas y los viejos mitos acerca de remolinos infernales y olas inmensas como montañas también han sido olvidados. ¿O no es así?
¡Una ola gigante a proa!

No se creyó que fueran reales. Durante siglos muchos marineros afirmaron haber escuchado relatos, o incluso haber sobrevivido de milagro, al encuentro con olas inmensas surgidas repentinamente en medio del océano sin que nada hubiera hecho sospechar que las aguas podrían enfuecer. No se trataba de tsunamis, que son “inofensivos” en alta mar. Tampoco eran olas provocadas por tormentas o fuertes vientos pero, según se decía, si la suerte no te acompañaba, podrías encontrar tu nave frente a un muro de agua con decenas de metros de altura avanzando hacia ti sin aviso, una furia incontenible surgida del mar en calma. Ningún barco podía superar aquello. Se trataba de los verdaderos monstruos del mar pero, como cualquier monstruo, no existían. Eso se pensaba hasta que la realidad demostró que el océano guarda muchas más sorpresas de las que cabía imaginar.

Con el tiempo fueron acumulándose todo tipo de historias sobre barcos que desaparecían en los mares sin causa aparente, se imaginaron terribles triángulos de la muerte donde alienígenas con mala intención decidían enviar todo tipo de naves a los abismos marinos. Imaginación no faltaba y, en esa misma categoría fantástica, se incluían las olas gigantes. Se trataba de muros de agua de un tamaño increíble pero, a pesar de los registros, al no haber causa aparente para los mismos, fueron catalogados como fenómenos imposibles. Hoy, gracias a algunos estudios por satélite y a varios casos relativamente recientes, no cabe duda: en el océano pueden darse olas con más de treinta metros de altura capaces de surgir de la nada, sin causa aparente. A pesar de los muchos modelos matemáticos y de otro tipo que se han propuesto para explicar este tipo de fenómenos, no se ha llegado a averiguar realmente el mecanismo que mueve esos infernales muros de agua.


El Caledonian Star en 2001.

Las olas gigantes seguían en el limbo entre lo fantástico y lo real, creyendo algunos en ellas, siendo negadas por otros, cuando el Caledonian Star se encontró el 2 de marzo de 2001 con algo increíble. Este navío de cruceros de aventura, actualmente renombrado como National Geographic Endeavour, cuenta con 2.557 toneladas, una longitud de casi 88 metros y seis cubiertas. No es pequeño, ni mucho menos, pero no estaba preparado para lo que se le vino encima. De hecho, no hay navío que se pueda enfrentar alegremente a un monstruo como el que les “atacó”. Aquel día, navegando por el Pasaje de Drake, entre América del sur y la Antártida, un imponente muro en forma de ola de más de treinta metros de altura sorprendió a la nave. Ningún maremoto, tormenta o fenómeno similar pudo ser encontrado para explicar un encuentro así. Simplemente, de la nada, en un mar relativamente calmado, surgió el muro y barrió la nave. Las ventanas saltaron, el puente de mando quedó inutilizado y, de milagro, el navío pudo superar el choque. A la deriva, completamente desarmado, sin electricidad ni aparatos de navegación, el Caledonian Star tuvo que ser asistido por la Armada Argentina hasta llegar a buen puerto. Desde ese día, el mar volvió a ser habitado por monstruos.

El día que el océano volvió a ser temible
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El 26.05.11, en Geo, por alpoma